La protección de datos sigue siendo una asignatura pendiente para muchas empresas. Aunque el RGPD lleva años en vigor y cada vez hay más concienciación, en 2025 aún es habitual encontrar errores que pueden derivar en sanciones, brechas de seguridad o pérdida de confianza por parte de los clientes.
Desde PymeLegal, compartimos los 5 fallos más comunes que seguimos viendo cada semana en auditorías y acompañamientos legales. Si quieres proteger tu negocio, evitar multas y cumplir con la normativa, este artículo es para ti.
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Formularios sin consentimiento claro ni información legal
¿Tienes formularios de contacto, suscripción o reserva en tu web? Entonces también deberías tener:
- Una casilla sin marcar de forma obligatoria para recoger el consentimiento.
- Un texto explicativo que indique quién trata los datos, con qué finalidad y cómo ejercer derechos.
Aún hoy, muchas webs muestran formularios sin esta información, o peor: con casillas ya marcadas por defecto. Esto vulnera el RGPD, que exige un consentimiento específico, informado y libre. Además, si vas a enviar comunicaciones comerciales (como newsletters), necesitas una segunda casilla independiente para ello.
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Banners de cookies que no permiten rechazarla
El aviso de cookies es uno de los elementos más visibles y también más incumplidos. Según la normativa:
- El usuario debe poder aceptar, rechazar o configurar las cookies con el mismo nivel de visibilidad.
- Las cookies no se pueden instalar antes de obtener el consentimiento (salvo las técnicas o necesarias).
Muchos banners aún muestran solo la opción de “Aceptar” en grande y ocultan o dificultan el rechazo. Esta práctica está siendo perseguida por la AEPD, y las sanciones pueden alcanzar los 30.000 € incluso para pymes o autónomos.
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No contar con textos legales adecuados o actualizados
Tener una web con textos copiados de otra empresa, o antiguos, sigue siendo una práctica habitual. Cada web debe tener como mínimo:
- Aviso legal
- Política de privacidad
- Política de cookies
Y si vendes online: condiciones generales de contratación.
Estos textos deben estar adaptados a tu actividad concreta, a los tratamientos de datos que realizas y a la normativa actual. De lo contrario, estarás dando información incorrecta a tus usuarios… y eso también es sancionable.
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No formar ni hacer firmar cláusulas de confidencialidad a empleados
La protección de datos no es solo una cuestión técnica o legal: también es una cuestión de personas. Cualquier trabajador que acceda a datos personales debe:
- Estar formado sobre sus obligaciones legales.
- Firmar una cláusula de confidencialidad.
Muchas empresas siguen sin incluir este paso en sus procesos de incorporación, lo que genera riesgos importantes si hay filtraciones, errores humanos o bajas laborales. La responsabilidad es siempre de la empresa, no del trabajador.
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No proteger contenidos propios ni registrar la marca
Si tu empresa ha creado una web, una formación, textos, diseños o incluso una app, deberías proteger esos contenidos como propiedad intelectual. Lo mismo ocurre con tu nombre comercial, logotipo o eslogan, que puedes registrar como marca para evitar que otra empresa los utilice o los registre antes que tú.
Muchos negocios aún no lo hacen, y en caso de plagio o disputa legal, no hay prueba de autoría ni protección jurídica. Esto puede suponer pérdida de reputación, ingresos o incluso el dominio web.
Cumplir con la normativa de protección de datos no solo evita sanciones: protege tu reputación, mejora la confianza de tus clientes y te permite trabajar con seguridad jurídica. Si te has sentido identificado con alguno de estos errores, estás a tiempo de corregirlos.
En PymeLegal te acompañamos para que tu empresa cumpla con el RGPD, la LOPDGDD y la LSSICE, con servicios adaptados a tus necesidades: consultoría legal, auditorías, plataforma online, protección de contenido, registro de marca y más.
¿Te ayudamos a revisar tu situación actual? Ponte en contacto con nuestro equipo.